2/4/12

La humanitat de Déu

La setmana passada us feiem saber per correu electrònic que el programa Millenium, del 33, anava dedicat a aquest tema, arran del llibre publicat per José Maria Castillo "La humanidad de Dios". Els que no el vau poder veure teniu l'oportunitat de fer-ho a través d'internet, TV3 a la carta.

Abans, però, d'aquest programa en Llorenç Casanova havia preparat per a ser publicat en aquest blog, un resum de l'article aparegut a El Ciervo, el novembre del 2011, año LX nº728, sobre aquest mateix llibre. Aprofitem doncs aquesta ocasió per publicar-lo i convidar-vos en aquesta setmana santa a dedicar alguna estona a reflexionar sobre les qüestions que es plantegen.

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He llegit l’article del que recomano la seva lectura complerta. Faré un petit resum amb les idees que considero bàsiques. Ja sé que tot text fora del seu context pot esdevenir un pretext però intentaré defugir aquest perill, per aixó recomano la seva lectura complerta.

Després d’una introducció sobre l’ensenyament de la religió, en particular de la teologia, fa unes reflexions sobre Déu amb el títol de “Pensar al Trascendente”. El que s’escriu interpel·la a les tres religions monoteístes: Cristianisme, Islam, Judaísme, amb aplicacions a cadascuna d’elles. Després fa unes reflexions sobre l’Església amb el títol “El futuro de la Iglesia”:

[...] Dios és el trascendente [...] más allá de los límites de nuestro conocimiento experimental y demostrable. [...] Por eso, cuando las religiones nos hablan de Dios, realmente no hablan, ni pueden hablar, de Dios en sí, sino que nos hablan de las representaciones de Dios que los humanos nos hacemos. Nuestra representación de Dios es una proyección de nuestra anhelos más fuertes: el poder, la bondad, la felicidad. Así nos ha salido un Dios infinitamente poderoso e infinitamente bueno. [...] El resultado ha sido un Dios contradictorio y un Dios peligroso. [...] Contradictorio porque el poder sin límites y la bondad sin límites no son compatibles con el mal que hay en el mundo. Peligroso porque todo Dios monoteista es, por eso mismo, un Dios excluyente. De ahí que, inevitablemente, es también un Dios violento.

[...] Lo más determinante en nuestra vidas no son las verdades, que brotan de los contenido mentales. Lo más determinante son las convicciones, que se traducen en formas de conducta y en hábitos de vida.

(Veure també Nietzsche F., El Anticristo, pàrragraf 38.)

[...] En la tradición cristiana el Trascendente se nos hace presente [...] en Jesús de Nazaret [...] que es la humanización de Dios. [...] con la afirmación decisiva: “lo que hicisteis por una de éstos, a mí me lo hicisties”. En esa sentencia definitiva, ya no se tendrá en cuenta ni la fe, ni la religión. Sólo quedará en pie lo humano.

[...] La consecuencia es que el proyecto cristiano no puede ser un proyecto religioso o sagrado de divinización, sino un proyecto profano y laico de humanización.

[...] Lo determinante, para encontrar a Dios, no es la fe, sino la ética, que se traduce en respeto, tolerancia, estima y misericordia.


El futuro de la Iglesia

[...] Hoy, esta posición preponderante de la Iglesia y su teologia se ha hecho insostenible.. Porque ha perdido su falsa consistencia. El progreso de la ciencia y el avance incontenible de las tectnologías van poniendo a las religiones en su sitio. Las religiones se resisten al cambio y, con frecuencia, se quedan atascadas en la fidelidad a tradiciones de un pasado que ya nunca va a ser determinante en la vida de los individuos y de los pueblos.

[...] Ese desajuste se pretende explicar por causa de la prepotencia y el afán de mando de los dirigentes de las regiones. [...] Es la teoria sobre Dios la que falla. [...] la gente se imagina que encuentra a Dios en un Tú trascendente, que nos impone desde un poder inapelable. [...] Esa representación de Dios es la que está en la base y es la explicación de la actual crisis de la Iglesia (i de l’Islam i del Judaísme) [...] Es cada día más escaso el número de personas que se atreven a seguir creyendo en ese Dios contradictorio y peligroso. Por esos insisto que a Dios solo lo podemos encontrar en nuestra inmanencia, en lo laico, en lo secular, en lo civil, en lo humano. [...] Porque lo importante no es la religión sino Dios que solo podemos encontrar en nuestra inmanencia y en nuestra humanidad.

[...] Como decia Karl Rahner : solamente tendrá sentido y futuro la teología que sea capaz de aportar algún sentido a la vida [...] una forma de vida que, por ser más plenamente humana, por eso sea también más plenamente feliz.